Guía:
1- Tu equipo creativo revisará toda la información por separado y empezarán a pensar en “puntas”, esos posibles caminos que pueden terminar en el concepto perfecto para tu marca.
2- Luego se juntarán para empezar con el famoso brainstorming, también llamado “pingpongneo” o “peloteo”. En estas reuniones se revisan las puntas o los insights encontrados y en colaboración de todos se empieza a pensar y a bajar las ideas.
3- Se escogen varios conceptos que luego se van descartando hasta estar todos de acuerdo y contentos con el concepto creativo que propondrán para la marca.
4- Bajo ese concepto creativo se desarrollan las piezas. Muchas veces en el brief el cliente solicita piezas específicas: comercial de tv, cuña de radio, aviso, contenido para redes. Sin embargo, es responsabilidad de los creativos analizar si estos medios son los correctos para comunicar el nuevo concepto creativo de la marca. Es decir que un cliente puede pedir un comercial de tv y la recomendación de la agencia podría ser realizar un videoclip para redes sociales.
5- Se buscan referencias gráficas y audiovisuales que servirán para crear la nueva gráfica o escribir el guion del comercial.
6- Creación y desarrollo de todas las piezas gráficas que incluirá la propuesta. Este proceso puede tomar varios días, de acuerdo a la cantidad de piezas que se ejecuten para la propuesta.
7- Armado de la presentación para el cliente con las propuestas o caminos trabajados. Esta incluye por cada camino un racional creativo, acá se explica ese insight o hallazgo que disparó al concepto, funciona como una breve explicación previa a la revelación del concepto creativo, seguido del concepto creativo y la bajada de las piezas según la estrategia de medios planteada.
Bonus: Una buena forma de vender un concepto creativo es a través de un manifesto. Conjunto de imágenes que acompañadas de una locución te cuentan de qué se va a tratar el concepto de tu marca, la esencia del mismo y el mood en general que tendrá la campaña.
8- Se agenda una reunión con cliente en la que se presentan los caminos desarrollados. El cliente aprueba el camino que considera más adecuado para su marca y se definen detalles antes de producir la campaña. En esta etapa es probable que el cliente solicite ajustes, que se trabajarán hasta tener una propuesta pulida con la que cliente y agencia se sientan satisfechos.
Aprobada la propuesta, en el caso de que esta incluya spots para tv o para redes sociales, el siguiente paso es involucrar a las productoras. La agencia abre una licitación junto al cliente, para buscar la productora más idónea, para lograr el spot publicitario.
